Mesa de debate «Narración audiovisual, lectura de imágenes y engagement»
Moderadores:
José-Luis Valhondo-Crego
Universidad de Extremadura. Grupo ARDOPA
Agustín Vivas-Moreno
Universidad de Extremadura. Grupo ARDOPA
Día y hora:
Jueves, 21 de octubre, de 11.30 a 12.00.
Aula: Mesa virtual.
Envía tu propuesta de ponencia a esta mesa siguiendo estas pautas
El modo en que nos vemos implicados por la potencia retórica de una narración audiovisual influye en cómo entendemos y cambiamos nuestras actitudes hacia los temas tratados (Busselle y Bilandzic, 2009). Artistóteles describió el modo en que creía que los espectadores de su época se purificados por las fuertes emociones que generaban la tragedias. El término “catarsis” ha permanecido en nuestro acervo lingüístico para recordarnos ese tipo de efectos que se han diversificado y multiplicado a través de las diferentes pantallas que nos interpelan cotidianamente. El asunto ha ganado complejidad desde una perspectiva multidisciplinar que incluye a las ciencias de la comunicación, la narratología, la psicología cognitiva y la neurociencia. Los modelos sobre los procesos implicados indican la relevancia de dimensiones como la comprensión de la narración, la concentración, la involucración emocional y la presencia narrativa.
Por un lado, en estos procesos juega un papel fundamental el engagement con los personajes (Bálint y Kovács, 2010). Nuestras reacciones a los relatos audiovisuales guardan relación directa con aspectos socioculturales de la identidad y con elementos propios de la estructura narrativa formal (Bordwell, 1985). Los personajes del filme o la serie de televisión pueden generar nuestra empatía en el triple sentido fisiológico, cognitivo y afectivo, así como nuestros juicios morales respecto al asunto objeto del relato.
Por otro lado, diversos estudios apuntan a la importancia del engagement en el disfrute de los contenidos, su comprensión y su capacidad para modificar nuestras expectativas y atribuciones sobre la realidad circundante.
Es evidente que el tema no se agota en la producción audiovisual clásica sino que afecta a otros medios y géneros. Cuando se analizan las experiencias de las audiencias frente a personajes ficticios modelados en 3D, el modelo de PEFiC (Perceiving and Experiencing Fictional Characters) distingue tres fases: codificar, comparar y responder (Van Gugt, Hoorn y Konijn, 2011). La respuesta a personajes virtuales implica el establecimiento de un engagement, que incluyen procesos paralelos de implicación (empatía, simpatía, desafío) y distanciamiento (antipatía, irritación, aburrimiento )del personaje. En contra de la intuición, la implicación y el distanciamiento no son extremos de un continuo.
Del mismo modo, el engagement también afecta directamente a los campos de la publicidad comercial, el marketing y la identidad corporativa.